CIUDAD DE MÉXICO.- Las autoridades mexicanas enviaron el martes mensajes contradictorios sobre la muerte violenta de una destacada figura LGBTQ+ después de que miles de mexicanos marcharan el lunes por la noche para exigir justicia.
El cuerpo de Ociel Baena presentaba una veintena de heridas y se encontró junto al de su pareja, en un domicilio de la ciudad de Aguascalientes, en el centro de México, según la fiscalía estatal.
Baena fue la primera persona abiertamente no binaria en asumir un cargo judicial en México, en el Tribunal Electoral estatal de Aguascalientes, y rompió otras barreras en un país donde los miembros de la comunidad LGBTQ+ son a menudo objeto de violencia.
Ya había recibido amenazas de muerte y mensajes de odio y contaba con un equipo de seguridad del Estado, lo que llevó el lunes a muchos en el país a calificar su muerte como un crimen de odio debido a que las autoridades proporcionaron detalles mínimos sobre el asesinato y los fiscales locales insinuaron que la muerte podría haber sido un suicidio.
Al dar a conocer nuevos detalles del caso, la Fiscalía de estado de Aguascalientes planteó como hipótesis que la pareja del activista, Dorian Herrera, asesinó a Baena con navajas de afeitar antes de quitarse la vida.
Puede parecer una hipótesis, para muchas personas, poco creíble, pero estamos siendo cuidadosos, sobre todo para dejar el registro y conservación de todos estos indicios. Y eso sin mencionarte toda la inspección que se realizó sobre el lugar”, indicó el fiscal estatal Jesús Figueroa Ortega a medios locales. Figueroa Ortega agregó que Baena presentó una herida mortal en la yugular y que se encontraron manchas de sangre en la cama y huellas de pisadas ensangrentadas en la casa.
Horas después, la Fiscalía de Aguascalientes informó a The Associated Press que Herrera había dado positivo a metanfetamina.
Sin embargo, las autoridades federales pidieron el martes cautela en la investigación. Félix Arturo Medina, subsecretario de Derechos Humanos de México, dijo a la prensa que “es un caso relevante para nosotros no solamente por el activismo que llevaba a cabo le magistrade”, sino también porque el gobierno quiere que todos los delitos se investiguen.
La impunidad campa a sus anchas en México. Sólo 1% de todos los delitos cometidos fueron denunciados, investigados y resueltos en 2022, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
La hipótesis de la fiscalía estatal fue inmediatamente rechazada por la familia y los amigos de Baena y Herrera, quienes aseguraron que esta versión de los hechos era “completamente impensable.”
Máximo Carrasco, amigo de ambos desde hace más de cinco años y quien habla en nombre de las familias de la pareja, dijo que sus seres queridos exigían que la investigación pase a manos de investigadores federales.
Yo sabía cuál era su dinámica de pareja”, dijo Carrasco. “Era un crimen de odio… La Fiscalía no está haciendo su trabajo, porque en lugar de investigar, quiere dar carpetazo”.
Carrasco mencionó que a menudo invitaba a Baena y a Herrera a quedarse en su casa de Ciudad de México y que ni él, ni nadie cercano, vio otra cosa que una relación cariñosa y respetuosa. Carrasco, que los vio apenas una semana antes de morir, se hizo eco de otros relatos que describen al magistrado y a Herrera como personas animadas y que hablaban apasionadamente sobre el activismo futuro.
Alejandro Brito, director del grupo Letra S, que defiende los derechos de la comunidad LGBTQ+, dijo que la presencia de Baena en redes sociales le convirtió en un blanco e hizo un llamado a las autoridades para que tomen en consideración ese contexto durante su investigación.
Fue una persona que recibió muchos mensajes de odio, de amenazas de violencia, hasta de muerte. Entonces, es imposible investigar estos hechos violentos sin tomar en cuenta el contexto”, dijo Brito. “Elle, magistrade, estaba rompiendo ese círculo de invisibilidad en que estaba encerrada esta comunidad”.
Brito se hizo eco de miles de personas que se reunieron en el corazón de Ciudad de México encendiendo velas sobre las fotos de Baena y otras víctimas de la violencia el lunes por la noche. Gritaron “Justicia” y “No nos quedaremos callades” y exigieron una investigación exhaustiva de las muertes.
Ociel es y fue el actor más relevante en la lucha de los derechos humanos de la comunidad”, dijo Humberto Dena, un joven de 24 años que portaba una vela junto a miles de personas en la marcha. “Queremos que autoridades investiguen el caso y no simplemente decir que era un ‘crimen de pasional’”.
Baena hizo historia en octubre de 2022 al asumir el cargo de magistrado del tribunal electoral del estado de Aguascalientes. Se cree que fue la primera persona no binaria en Latinoamérica en asumir un cargo judicial. Baena rompió otra barrera en junio pasado cuando formó parte de un pequeño grupo de personas en recibir los primeros pasaportes no binarios emitidos en México.
Baena publicaba con cierta regularidad fotografías en las que aparecía con falda, zapatos de tacón alto o con un abanico con los colores del arcoíris dentro de las oficinas del tribunal, además de realizar labores de activismo en redes sociales, donde tenía cientos de miles de seguidores.
Soy persona no binaria, no me interesa verme mujer ni tampoco hombre, esa es una identidad, es mía y para mí, para nadie más”, escribió Baena en la plataforma X, anteriormente conocida como Twitter, en junio. “Soporten”.
El mes pasado Baena recibió un certificado del tribunal electoral en el que se le reconocía con el pronombre de género neutro “maestre”, un importante paso en el idioma español, que tradicionalmente tiene pronombres masculinos y femeninos.
Aunque Brito dijo que México había dado pasos importantes para reducir los niveles de violencia contra la comunidad LGBTQ+ en las últimas décadas, su grupo registró un repunte de actos violentos en 2019, documentando al menos 117 asesinatos de lesbianas, homosexuales, bisexuales o personas transgénero en el país. Muchos de ellos fueron homicidios grotescos, incluidos apuñalamientos y asesinatos en público.
El Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra personas LGBT registró 305 crímenes violentos de odio contra minorías sexuales entre 2019 y 2022, incluyendo asesinatos y desapariciones, entre otros.
Carrasco dijo que Baena fue una parte integral de la presión para reducir esas cifras y permitir a las personas no binarias ocupar espacios que nunca habrían imaginado.
El legado que dejó es muy fuerte. Nos enseñó que debemos de alzar la voz”, agregó.