TALLAHASSEE, Florida.- El huracán Helene atravesaba rápidamente el jueves el Golfo de México hacia Florida, amenazando con una marejada ciclónica “imposible de sobrevivir” en partes del noroeste del estado, así como vientos, lluvias e inundaciones repentinas perjudiciales a cientos de kilómetros (millas) tierra adentro en gran parte del sureste de Estados Unidos, informaron los meteorólogos.
El Servicio Meteorológico de México indica que Helene se localiza a 345 kilómetros al nor-noreste de Cabo Catoche, Quintana Roo, y su desplazamiento es hacia Florida.
Helene ahora como huracán de categoría 2 en la escala Saffir-Simpson, al norte de la costa norte de Quintana Roo. Su centro se localiza a 345 kilómetros al nor-noreste de Cabo Catoche, Quintana Roo, y a 515 kilómetros al suroeste de Tampa, Florida, EU”, reportó Conagua a través del Servicio Meteorológico de México.
Presenta vientos máximos sostenidos de 155 km/h, rachas de 195 km/h y desplazamiento hacia el nor-noreste a 19 km/h”.
Sus bandas nubosas originarán lluvias fuertes (25 a 50 mm) en Campeche, Yucatán y Quintana Roo; viento con rachas de 50 a 70 km/h, oleaje de uno a tres metros de altura y posible formación de trombas marinas en las costas de Quintana Roo (norte) y Yucatán (oriente), así como rachas de viento de 30 a 50 km/h en costas de Campeche”
Helene se convirtió en una tormenta de categoría 2 la mañana del jueves y se espera que se transforme en un huracán de gran magnitud la tarde del jueves, alcanzando la categoría 3 o mayor, cuando toque tierra en la costa noroeste de Florida. En las primeras horas del jueves, las alertas de huracán y de inundaciones repentinas se extendieron mucho más allá de la costa, hasta la zona centro-sur de Georgia. Los gobernadores de Florida, Georgia, las Carolinas y Virginia ya han declarado emergencias en sus estados.
La lluvia comenzó a caer en la oscuridad de la madrugada del jueves a lo largo de la autopista federal 98, que recorre la costa, con vientos que atravesaban incontables poblados pesqueros y centros vacacionales a lo largo de la zona de Big Bend, en Florida. Las gasolineras cerradas bordeaban la autopista de doble carril, con las ventanas cubiertas con tablones para protegerlas de la tormenta. La carretera estaba casi vacía al amanecer del jueves, y los conductores que circulaban, se dirigían hacia el noreste, a tierras más altas.
Se espera que la tormenta toque tierra en la región de Big Bend, donde se unen la península de Florida y la región de Panhandle, de acuerdo con Jack Beven, especialista en huracanes de alto nivel del Centro Nacional de Huracanes de Miami.
Independientemente de su potencia, se trata de una tormenta muy grande”, dijo Beven. “Tendrá impactos que abarcarán una amplia área”.
La oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Tallahassee pronosticó marejadas ciclónicas de hasta 6 metros (20 pies) y advirtió que podrían ser particularmente “catastróficas e imposibles de sobrevivir” en la bahía Apalachee de Florida. Añadió que los fuertes vientos y las fuertes lluvias también planteaban riesgos.
“Si se cumple, este pronóstico es una situación pesadillesca de marejada para la bahía Apalachee”, señaló la oficina. “¡Por favor, por favor, por favor, tomen en serio cualquier orden de evacuación!”
A lo largo de la costa del golfo de Florida, los distritos escolares y varias universidades han cancelado las clases.
Helene se encontraba a unos 515 kilómetros (320 millas) al suroeste de Tampa la mañana del jueves y avanzaba en dirección norte-noreste a 19 km/h (12 mph) con vientos máximos sostenidos de 155 km/h (100 mph). Los meteorólogos dicen que se convertirá en un huracán de categoría 3 o mayor, lo que significa que los vientos alcanzarán 177 km/h (110 mph).