NUEVA YORK.– El virtual presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, señaló el jueves que nominará al activista antivacunas Robert F. Kennedy Jr. como secretario de Salud y Servicios Humanos. Kennedy, una persona a las que funcionarios de salud pública consideran que tiene posturas peligrosas, estaría al frente de una enorme dependencia federal que supervisa todo, desde la inocuidad de medicamentos, vacunas y alimentos hasta la investigación médica y los programas de la red de seguridad social Medicare y Medicaid.
Los estadounidenses se han visto aplastados durante demasiado tiempo por el complejo industrial alimentario y las compañías farmacéuticas que han participado en engaños y desinformación en lo que respecta a la salud pública”, dijo Trump en una publicación en su plataforma de redes sociales Truth Social en la que anunció el nombramiento. Kennedy, aseguró, pondrá “fin a la epidemia de enfermedades crónicas” y hará que ”¡Estados Unidos sea grande y saludable otra vez!”.
Kennedy es uno de los activistas antivacunas más reconocidos a nivel mundial y desde hace tiempo ha impulsado la desacreditada idea de que las vacunas causan autismo y otros problemas de salud.
Miembro de una de las familias políticas más reconocidas del país, Kennedy es hijo del difunto secretario de Justicia Robert F. Kennedy y sobrino del presidente John F. Kennedy. Primero se postuló contra el presidente Joe Biden por la nominación del Partido Demócrata el año pasado. Posteriormente se lanzó como independiente hasta que dejó de lado su candidatura después de llegar a un acuerdo para respaldar a Trump con la promesa de obtener un papel en la política de salud del nuevo gobierno.
Desde entonces, él y Trump se han convertido en buenos amigos. Los dos aparecieron juntos en varias ocasiones durante la recta final de la campaña, y el expresidente dejó en claro que tenía la intención de darle a Kennedy un papel significativo en la supervisión de salud pública como parte de una campaña para “Hacer que Estados Unidos sea Saludable Otra Vez”.
Voy a dejar que se vuelva loco en (el sector) salud”, dijo Trump en un mitin el mes pasado.